Ocurrió hace unos años, una noche de carnaval, en un baile. Un amiguete mío, un tal Mengano, que generalmente no se vestía de mascaro, estaba tomando una copa y dando una vuelta por un salón de baile del pueblo, haciendo hora, para ir a otro sitio que había quedado con unas amigas. Cuando se le acercaron tres mascaras:
-Hola Mengano, “que no nos conoces”, “que torpe que eres” (con voz de mascara).
-Hola chicas, que tal, ¡como no os voy a conocer!, ¿qué hacéis aquí?, ¿no habíamos quedado en tal sitio? -dijo Mengano muy seguro de si mismo- Anda, vamos a tomar algo, que os invito.
-Venga vamos a tomar algo que nos invita nuestro amigo Mengano (con voz de mascara).
-Que ignorantes creían que no las iva a conocer- pensaba Mengano-
Pasaron por caja, y luego por barra, y las mascaras se pidieron unos cubalibres. Le dieron unos tragos y se despidieron de Mengano:
-Gracias, Mengano, “que eres mu torpe, que no nos conoces”
-Je je je, que se creen que soy tonto.
Mi amíguete seguía por el baile, soportando y aguantando las bromas de las mascaras, que se cebaban con el, pues era una persona bastante conocida en el pueblo, y encima no iba disfrazado.
No tardaron mucho en llegar otra vez las tres mascaras “amigas”.
-Hola mengano, invítanos a otro cubalibre, “torpe que no nos conoces” (con voz de mascara).
-Je je je, venga que queréis tomar, lo de antes o lo de siempre?
-No no, lo de antes, pídenos lo mismo de antes “torpe, que eres mu torpe” (con voz de mascara).
-Bueno que ya se quien sois, ya no hace falta que disimuléis conmigo, además os prometo que no se lo voy a decir a nadie.
-Anda Mengano pide las copas, “que eres mas torpe que nadie”.
Esta operación se repitió varias veces a lo largo de toda la noche. Y todos tan contentos. Mengano estaba orgulloso de si mismo pues a pesar de todo había conocido a las tres mascaras “bebedoras”, – y todavía se piensan, que no las conozco, que ignorantes, je je je-. Las mascaras por su cuenta cada vez estaban mas contentas, tanto por el efecto del alcohol como por las invitaciones del “primo” Mengano.
Al día siguiente, coincide Mengano con sus verdaderas amigas.
-Hola chicas, ¿que? ¿Ya vais a reconocer que sois vosotras las de anoche?. Porque vaya como bebéis, me dejasteis pelao, sin un duro.
-Que dices Mengano, si anoche no te vimos.
-Venga, chicas, dejaos ya de cachondeo, que ya somos mayorcitos.
-Que no Mengano, que no, en serio que no te vimos en toda la noche, nosotras estuvimos toda la noche en tal sitio además, sabes que quedamos alli y tu no apareciste en toda la noche. Que paso, cuéntanos que paso, o ¿es que no bajaste y te estas inventando algún rollo?
-Efectivamente chicas, lleváis razón, anoche no baje, trataba de engañaros. Perdonarme.
-Ji ji ji , pareció escucharse por alrededor
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